Los certificados de sostenibilidad son herramientas que permiten establecer unos criterios y objetivos en la construcción o renovación de edificaciones, para que sirvan así de guía y de evaluación independiente, a aquellos que pretendan desarrollar una construcción sostenible.
Por otro lado, los certificados ayudan a la divulgación y promoción de esas características en las edificaciones, que a menudo son poco visibles a simple vista. En resumidas cuentas, son un sello de calidad.
Historia y origen
VERDE, acrónimo de Valoración de Eficiencia de Referencia de Edificios, es una certificación española desarrollada y gestionada por el Green Building Council España (GBCe).
Constituido en 2009, GBCe pertenece a la red internacional de World Green Building Council (WorldGBC), con presencia en más de 70 países y 36.000 miembros
Tipos de certificado
Los esquemas de certificación varían en función del tipo de proyecto.
En un principio, se empezaron a desarrollar para el sector residencial, pero con el paso del tiempo se han establecido nuevos certificados.
En la actualidad existen 3 tipos de certificado: Residencial (unifamiliar o urbanizaciones), Equipamiento (oficinas, equipamientos, comercial, docente, etc.) y Polígonos (para parques logísticos)
Tanto para Residencial como para Equipamiento, se pueden aplicar en obras de nueva construcción, en rehabilitación y en edificios existentes, mientras que Polígonos solo se puede aplicar en parques logísticos de nueva construcción.
Proyectos VERDE
En la actualidad existes en España 109 construcciones (según el mapa de proyectos de la web) en alguno de las fases de la certificación, desde la solicitud de precertificación, pasando por el registro, precertificado, evaluado y certificado.
Se pueden acceder a todos los proyectos del registro VERDE en la web: https://gbce.es/edificios/
Características de la certificación
Es necesario contactar con un Evaluador Acreditado VERDE (EA VERDE), que realizará todos los trabajos de inscripción, seguimiento y evaluación para conseguir la certificación de la sostenibilidad del edificio. El EA VERDE es un profesional independiente que dispone de licencia vigente, que ha superado una formación desarrollada por GBCe. Esta figura es similar a la del certificado BREEAM (Asesor BREEAM).
Existen registrados un total de 193 Evaluadores Acreditados VERDE.
Apartados que evalúa
Los certificados suelen agrupar los diferentes requisitos a evaluar en bloques temáticos.
En VERDE existen 7 categorías: Parcela y Emplazamiento, Energía y Atmósfera, Recursos Naturales, Calidad del ambiente interior, Aspectos sociales y económicos, Concepto de calidad e Innovación.
En cada una se evalúan distintos aspectos y se establece un sistema de puntos en función de los hitos registrados que se consigan. Al final se realiza la suma de todos los puntos y en función del resultado final se obtiene una categoría u otra de certificación (o no se obtiene).
Estas puntuaciones, y los apartados que incluye cada categoría, dependen de la certificación a la que se vaya a optar, que será la correspondiente al tipo de proyecto que tengamos.
En función del porcentaje de puntos que se obtenga sobre el máximo posible, se obtendrán desde 1 a 5 hojas.
El agua en la certificación VERDE
Como en todos los certificados, un apartado importante es el de la sostenibilidad en el uso del agua. Dependiendo del tipo de edificación, y por tanto de certificado, los requisitos sobre el agua varían. Para no extendernos demasiado, vamos a analizar el esquema de certificación VERDE Residencial.
La categoría en la que se evalúa el consumo sostenible del agua es la de Recursos naturales.
El porcentaje de puntos de esta categoría sobre el total es de un 26.39%, y de esta, los que están ligados con el uso sostenible del agua, suma un 8.07%.
Los conceptos y las puntuaciones que evalúan el uso sostenible del agua en el bloque de Recursos naturales son las siguientes:
A diferencia de otros esquemas como LEED y BREEAM, para el cálculo de la reducción de consumos, no sólo se establecen unos objetivos, sino que se proporciona además la metodología para su cálculo, facilitando el trabajo a los redactores del proyecto.
Conclusiones
El certificado VERDE, como todos, tiene ventajas e inconvenientes, al menos desde el punto de vista de la gestión del agua.
Ventajas: Al ser un certificado sólo español, está adaptado a las características climáticas de España, lo que permite profundizar más en los cálculos y sacar unas conclusiones más fiables, que si se tuviera que adaptar a diferentes realidades y climatologías.
Inconvenientes: El nivel de implantación y conocimiento es aún bajo comparado con otros esquemas, lo que va en detrimento del impacto en comunicación del proyecto.
Al igual que en BREEAM, en VERDE existe la figura del Evaluador Acreditado, cuya presencia es obligatoria (no puedes realizar el proceso sin él), algo que se puede ver como un inconveniente, pero que por otra parte te guía y asesora en todo el proceso, lo que al final también es una ventaja.
Si te interesan los certificados de construcción sostenible, puedes consultar otros artículos de esta serie: BREEAM, LEED, GRESB y WELL.
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